En 1943 y con el argumento de que el espíritu deportivo del Necaxa de ninguna manera podía ir de la mano con la profesionalización y comercialización del futbol mexicano, los entonces Electricistas se retiraban de la competencia ante la tristeza y decepción de toda la afición y especialmente de la afición rojiblanca.
Necaxa era una leyenda que respetaban propios y extraños.
Imagínense que la directiva del Club Oro de Guadalajara ofreció a la del Necaxa con base en la historia y abolengo del equipo que ponían a su disposición Casa Club, Estadio de Oblatos y lo que requirieran con tal de que no desaparecieran, sin embargo, esta importante oferta no se acepto.
Necaxa volvería en 1950 y permanecería en la Primera División Nacional hasta 1971 en que se daría su segunda desaparición.
El 19 de septiembre de 1971 Necaxa jugaría contra los Cementeros de Cruz Azul el partido de vuelta de la Copa México después de haber empatado sin anotaciones en el encuentro de día.
Ni los jugadores rojiblancos ni mucho menos los aficionados podían suponer que este seria el ultimo partido del Necaxa en Primera División.
El partido fue bastante deslucido y el Necaxa fue goleado cuatro goles por cero y por lo tanto eliminado de la Copa México.
Esa ultima alineación necaxista fue con Toño “Piolín” Mota en la portería; la defensa la integraron Roberto “Loquito” Martínez, Jaime “Cordobés” García, Ernesto “Chiquilín” Cervantes y “Japo” Magaña; el medio campo estuvo integrado por José Luis “Sabanita” Rivera y los argentinos Eduardo Cremasco y Vicente de la Mata; finalmente adelante jugaron Domingo Pérez, Salvador Frías y Francisco Javier “Tato” Linares, para el segundo periodo Soriano sustituyo a Frías y Miguel Ángel Perrichon a Domingo Pérez.
Como anteriormente mencione nadie sabia que las cartas ya estaban jugadas y la sorpresa se dio, el 22 de octubre de 1971, Don Julio Orvañanos anunciaba la venta del Necaxa a un grupo de inversionistas españoles que pensaban revivir la rivalidad entre españoles y mexicanos de los años treintas y que crearon una nueva franquicia que llevo el nombre de Toros del Atlético Español.
La estocada fue mortal. La afición necaxista se alejo y se refugio en otras camisetas. El Gordo Ordoñez (QEPD) se cambio al Cruz Azul, sin embargo, quedamos muchos fieles clamando por la vuelta del Necaxa.
La realidad es que a los Toros no les fue mal, el equipo también tuvo momentos de gloria al disputar la Final por el Título en la temporada 1973-74 y ganar la Copa de Campeones de la Concacaf 1975.
Esta es la historia. El 21 de julio de 1982 el Necaxa bajo la ferula de Grupo TELEVISA regreso y en la decada de los 90´s se convirtio en una nueva leyenda de la que hasta hoy disfrutamos todos los fervientes aficionados del Necaxa.
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